En el mundo empresarial, donde la transparencia financiera es más importante que nunca, estar preparados para una auditoría es indispensable para cualquier negocio, grande o pequeño. Esto se debe a que, la posibilidad de enfrentarse a una auditoría contable es una realidad para todas las empresas, convirtiéndose en un proceso que no solo evalúa la precisión de los registros financieros, sino que también refleja la salud e integridad de la organización. Legálitas Impulsa sabe lo tedioso que puede resultar este proceso, por ello, en el artículo de hoy explicará cómo tener tus cuentas gestionadas para afrontar una auditoría contable.

¿Qué es una auditoría contable y por qué es importante?

Una auditoría contable es un proceso exhaustivo de revisión y evaluación de los registros y estados financieros de una empresa o entidad, llevada a cabo por un auditor o una firma de auditores independientes. Dicho procedimiento, se realiza con el objetivo de verificar con exactitud, integridad y fiabilidad de la información contable presentada por la organización, asegurando que ésta refleje de una manera fidedigna su situación económica, financiera y patrimonial, conforme a los principios de contabilidad generalmente aceptados o a las normativas contables aplicables.

Entonces, ¿por qué es importante? Una gestión contable eficiente es fundamental para el éxito y estabilidad de cualquier negocio. No solo ayuda a reducir los riesgos financieros, sino que también asegura el cumplimiento de las normas vigentes. Además, una buena gestión, puede reducir los riesgos, es decir, minimizar las probabilidades de enfrentar problemas legales o financieros inesperados. Y cabe destacar que, el hecho de estar al día con las leyes y regulaciones contables evita sanciones y multas que puedan surgir durante la auditoría.

¿Qué pasos se llevan a cabo a la hora de realizar una auditoría contable?

Los procesos de auditoría se adaptan en función de la naturaleza específica de la actividad y la amplitud del examen que la organización necesita. Por lo que, cuando se trata de realizar una auditoría contable, que evalúe de forma exhaustiva la posición financiera de la compañía, hay que llevar a cabo una serie de pasos:

• Valoración global de la empresa: se evalúa cómo actúa la empresa en su sector, cómo está organizada su estructura interna, pasando por todas sus áreas.
• Análisis financiero: técnicamente se realiza un estudio de toda la empresa, pero se hace especial hincapié en la parte financiera.
• Supervisión de los activos: se examinan los activos de la empresa y los inventarios de la misma, además del estado patrimonial.
• Aprobación de los resultados de la empresa: se trata de verificar los resultados de la empresa en sus registros financieros y contables.
• Evaluación de la empresa: es una fase importante de la auditoría, ya que implica analizar y observar las actividades diarias de la empresa; teniendo en cuenta sus políticas.
• Confirmación de los datos recopilados: en este punto se debe comprobar que todos los datos recogidos durante la auditoría son correctos.
• Certificación de la auditoría contable: es la fase final, donde se muestran las conclusiones alcanzadas con los datos recopilados. Aquí se pueden incluir los puntos fuertes y aquellos a mejorar.

¿Qué necesito para tener mis cuentas gestionadas y poder superar una auditoría contable?

Para tener tus cuentas gestionadas y poder superar una auditoría contable, lo primordial es tener todas las actividades de tu empresa en orden, haber recogido todo ello en los documentos correspondientes; y a la hora de la verdad, entregar toda la documentación necesaria para pasar con éxito la prueba de fuego. ¿Qué documentos son esos?:

● Actas de asambleas y juntas de accionistas.

● Estados financieros.

● Contratos y convenios.

● Libros contables.

● Registros de nómina.

● Declaraciones fiscales.

● Informes internos y externos.

● Planes estratégicos y operativos.

● Políticas y procedimientos internos.

● Comprobantes de pago.

● Registros de inventario.

● Certificados y permisos.

● Correspondencia.

● Registros de seguridad.

● Información adicional.

Cómo afrontar el proceso de una auditoría contable

Cuando llega el momento de la auditoría contable, muchos no saben cómo afrontarla por los nervios que supone, pero para afrontarlo es importante mantener una actitud cooperativa y estar bien preparado. Es decir, una actitud abierta y colaborativa con los auditores puede facilitar el proceso. También, el hecho de tener toda la documentación necesaria lista y accesible es clave para una auditoría fluida. En pocas palabras, estar preparado para una auditoría contable, no tiene por qué ser una tarea abrumadora. Con una preparación y organización previa, tu empresa puede afrontar el proceso de auditoría con confianza y éxito. De igual forma, nunca está demás contar con la ayuda de una gestoría contable como es Legálitas Impulsa para ayudarte a tener todos tus documentos en regla.