Según la RAE (Real Academia Española) el despido es “la decisión del empresario por la que pone término a la relación laboral que lo unía a un empleado”. El despido constituye uno de los aspectos más delicados y complejos de la gestión de recursos humanos dentro de cualquier organización.

No solo implica el fin de una relación laboral entre el empleador y el empleado, sino que también conlleva una serie de consideraciones legales, éticas y sociales que deben ser meticulosamente evaluadas para asegurar que el procedimiento se realice de manera justa, transparente y conforme a la legislación vigente.

Desde Legálitas Impulsa explicamos los procedimientos de despido para tener toda la información necesaria sobre cómo tratar un tema tan delicado.  

Cómo despedir a un trabajador: Procedimiento adecuado

Los procedimientos de despido se encuentran regulados en la mayoría de los ordenamientos jurídicos a nivel mundial, con el objetivo de proteger los derechos de los trabajadores y evitar abusos por parte de los empleadores. Estas normativas establecen los fundamentos legales sobre los que se puede llevar a cabo un despido, ya sea por razones de rendimiento, de conducta, por necesidades de la empresa, etc. Asimismo, dichas normativas suelen precisar de ciertos pasos a seguir:

• Preaviso: solo cabe preaviso para los despidos objetivos y no es obligatorio, ya que, si el empresario no quiere preavisar, es suficiente abonar los días de falta de preaviso en la liquidación.
• La carta de despido: el documento en cuestión debe comunicar el término de la relación laboral, junto con un detalle de la liquidación y las sumas pendientes de pago. Es importante señalar que, cuando el motivo del despido es por razones objetivas que no se relacionan con problemas económicos, el pago correspondiente debe realizarse en el momento de la entrega de dicho documento. Asimismo, es necesario que se describan las circunstancias que justifican la finalización del contrato y se indique cuándo surtirá efecto esta decisión. Aunque la firma del empleado no es obligatoria, se aconseja que, si considera presentar una demanda legal, añada una nota de 'No Conforme' junto a su firma. En casos donde el despido se comunique de manera oral, este será considerado nulo bajo cualquier circunstancia.
• Entrega del finiquito: es la entrega de una suma de dinero que incluye los sueldos no pagados, las vacaciones que no se han llevado a cabo, y una cantidad adicional proporcional a las pagas extraordinarias devengadas pendientes de abono.
• Indemnizaciones: la cuantía económica varía dependiendo del tipo de despido reconocido y de la antigüedad del empleado en la compañía, así como su sueldo anual y el tipo de contrato celebrado.

Cuando llega el momento de que un empleado deja de formar parte de la empresa donde ha desarrollado su labor profesional, es hora de calcular el finiquito y que este se le entregue. Este derecho a recibir el finiquito se encuentra regulado en el artículo 49.2 del Estatuto de los Trabajadores. Pero antes de recibirlo, la empresa debe tener en cuenta una serie de variables. Con Legálitas Impulsa puedes saber cómo calcular el finiquito de un empleado en un clic.  

Tipos de despido

A nivel general, podemos encontrar en España tres tipos diferentes de despido laboral: 

Despido colectivo

Se entenderá por despido colectivo la extinción de contratos de trabajo fundada en causas económicas, técnicas, organizativas o de producción cuando, en un período de noventa días afectan al menos a 10 trabajadores de una empresa de menos de 100 empleados, el 10% de una empresa de 100-300 empleados o a 30 trabajadores en empresas con más de 300 trabajadores.

Despido objetivo

El artículo 51.1 del Estatuto de los Trabajadores regula este precepto. En concreto, sus causas (económicas, técnicas organizativas o de producción) son las famosas “causas ETOP” cuando hay motivos para proceder a un despido colectivo, pero no se llega al número concreto de empleados, se considera un despido por causas objetivas. En el despido objetivo, la consecuencia de no dar el preaviso será únicamente la obligación del empresario de abonar la cantidad de 15 días de salario correspondientes, por la falta de no preavisar.

Despido disciplinario

En este caso, este tipo de despido es causado por una acción inapropiada por parte del empleado y, en este caso, no recibiría ningún tipo de indemnización. Se entiende por despido disciplinario cuando el empleado lleva a cabo un incumplimiento grave como:

• Acoso laboral.
• Ofensas verbales.
• Robo de material.
• Desobediencia.
• Faltas injustificadas al trabajo.  

Tipos de despido laboral según el resultado judicial

Los tipos de despido laboral según el resultado judicial es la última valoración del juez, y podemos encontrar tres tipos:  

Despido procedente

El despido procedente es una forma de terminación del contrato laboral que el empleador justifica adecuadamente y sigue el proceso legalmente establecido. En este contexto, un despido objetivo permite al trabajador recibir una compensación económica calculada en base a 20 días de salario por cada año de servicio. Por otro lado, en un despido disciplinario, debido a que este se fundamenta en faltas o conductas indebidas del empleado, no se concede derecho a recibir tal indemnización.

Despido improcedente

En esta situación, el empleador no ha logrado justificar una violación del contrato de trabajo por parte del empleado, ni ha cumplido con los procedimientos legales necesarios para el despido. Por consiguiente, la empresa está obligada a reincorporar al empleado en su puesto. Además, deberá compensar al trabajador por los sueldos no pagados desde el momento del despido hasta el día que se reintegre, o bien, ofrecer una compensación al empleado basada en 33 días de salario por cada año de servicio. 

Despido nulo

Este tipo de despido resulta inviable de ejecutar porque infringe los derechos básicos del empleado o empleada. Por lo tanto, se interpreta que la compañía involucrada está actuando de manera discriminatoria hacia el individuo que pretende despedir. De acuerdo con ello, la ley española prohíbe explícitamente este tipo de acciones, asegurando la protección de los trabajadores contra prácticas injustas o discriminatorias en el ámbito laboral.

Legálitas Impulsa es una gestoría online especializada en varios ámbitos incluyendo el laboral. Por eso, si necesitas consultoría para saber cómo proceder ante un despido, no dudes en contactar con nuestro equipo, te ayudaremos en todo lo posible.  

Referencia legal:

Real Decreto Legislativo 2/2015, de 23 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores.