Según datos de los últimos meses recopilados por Aduanas, organismo que informa a la Secretaría de Estado de Comercio, las empresas españolas han incrementado sus exportaciones en un 22,1%, situándose en los niveles que había antes de la llegada de la COVID-19. Esto supone que en los primeros nueve meses de 2021 casi se alcanzaron los 230.000 millones de euros. Estas cifras dejan clara la demanda de nuestros productos y servicios en el exterior, así como la oportunidad de negocio que esta supone para las empresas y economía española.

Programas de financiación generales

Existen diferentes programas de financiación a los que puede acceder un autónomo o una empresa en función de los objetivos que se hayan marcado y de los requisitos que se soliciten.

• ICEX Next: este programa tiene como finalidad la internacionalización de las empresas y su crecimiento en el exterior. Por tanto, ayuda a incrementar la facturación fuera de nuestras fronteras, al tiempo que reduce el riesgo empresarial al diversificar su oferta a distintos mercados y mejora la competitividad individual y global de las empresas españolas. Para ello y durante dos años, los negocios dispondrán de asesores nacionales e internacionales que están especializados en ofrecer su ayuda en el desarrollo de estrategias de internacionalización, la mejora de su competitividad y la definición de un plan de negocio adecuado para los mercados seleccionados. Cabe señalar que para su elaboración se destinan 20.000 euros.
• FIEM: es el Fondo de Internacionalización de la Empresa y es concedido por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo con el mismo objetivo que el ICEX. Cuenta con 50 millones de euros y se encarga de la financiación de los estudios de viabilidad.

Opciones para financiar actividades en el exterior

Uno de los instrumentos de financiación con los que cuentan las empresas y los autónomos para financiar actividades, inversiones y necesidad de liquidez fuera de territorio nacional son los fondos ICO Internacional. Para acceder a ellos, sus negocios deben estar domiciliados en España o que al menos el 30% de su capital se encuentre en territorio nacional. El importe máximo por cliente será de hasta 12,5 millones de euros y tendrán un plazo de hasta 20 años para la amortización. En este caso los instrumentos de financiación son: préstamos, leasing y líneas de crédito.

Asimismo, dentro de los ICO Internacional existe también el crédito suministrador y comprador para aquellas empresas que desean financiación en el medio y en el largo plazo para su exportación. En este caso, el importe máximo por cliente es de 25 millones de euros y el plazo de amortización oscila entre los 2 y los 12 años.

Por otro lado, también hay que mencionar el ICO Exportadores, un programa que tiene como objetivo que empresas con domicilio social en España puedan anticipar las facturas de exportación. Hay que solicitarlo en las entidades de crédito con un importe de 12,5 millones de euros como máximo por cliente y año, en una o varias operaciones.

Otra alternativa posible se encuentra en COFIDES, institución pública estatal que pone el foco sobre la internacionalización de empresas españolas a la par que busca la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Cabe destacar entre sus iniciativas disponibles el Fondo para Operaciones de Inversión en el Exterior de la Pequeña y Mediana Empresa (FONPYME) y PYME Invierte, que se ajustan a las diferentes necesidades de las empresas.

• FONPYME: pensado para empresas españolas que lleven a cabo uno de los proyectos siguientes en el extranjero: creación de nueva empresa, ampliación de instalaciones existentes, adquisición de empresa existente o apertura de oficina comercial, para lo que podrán operar a través de una sucursal, una filial o incluso una empresa mixta. El importe a destinado a cada proyecto oscila entre los 75.000 y los 5 millones de euros, según sus características.
• PYME INVIERTE: este programa está recomendado para aquellas PYMES que buscan servicios adicionales a la financiación, ya que el ICEX se involucra como asesor durante el proceso de internacionalización. Los proyectos susceptibles de recibir financiación son inversiones productivas, así como implantaciones comerciales en el exterior que superen los 3 años. Para las inversiones productivas se destinan entre 75.000 y 10 millones de euros, con un plazo de financiación de entre 5 y 10 años. Por otro lado, para las implantaciones comerciales la ayuda máxima se limita a 1 millón de euros, amortizables en 3 años sin carencia.

En este punto conviene recordar que el FIEM recibe actualmente 50 millones de euros para el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Dicho fondo está gestionado por la Secretaría de Estado de Comercio (dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo) y provee de crédito a medio y largo plazo para las operaciones de exportación de bienes y servicios de empresas españolas, así como para la inversión directa de empresas españolas en el extranjero.

En definitiva, hay diversas herramientas que se pueden solicitar para financiar las actividades de la empresa en el exterior. Para acceder a ellas es necesario informarse o confiar en profesionales que puedan guiar a los empresarios en su misión de conquistar mercados foráneos.