¿Qué es el Plan General de Contabilidad?

LEGÁLITAS IMPULSA  

Todas las empresas tienen la obligación de registrar y valorar las operaciones que realizan, es decir, han de llevar a cabo una contabilidad que muestre sus cuentas anuales.

Para que esos registros tengan una base legal sobre la que crearse, existe un Plan General Contable (PGC) que establece cuáles son las normas por las que regirse.

Qué es el Plan General Contable

Si simplificáramos una definición, se podría decir que el Plan General Contable es una especie de manual en el que se exponen las reglas a partir de las cuales todas las empresas van a presentar sus cuentas. De ese modo, se unifican tanto el modo de valorar esas cuentas anuales, como su presentación, logrando un marco común para el registro de cualquier operación financiera, patrimonial, comercial y de contabilidad que deba presentar un negocio.

Cabe señalar que el actual Plan General Contable se aprobó en el año 2007, de manera que armonizaba el anterior PGC con la normativa europea (Real Decreto 1514/2007). Eso sí, el encargado de elaborar y aprobar la adaptación a los diferentes sectores económicos es el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC). 

Ventajas del Plan General Contable

Más allá de que las empresas puedan ver su cumplimiento como un hándicap, el PGC les ayuda a cumplir las obligaciones que tienen con la Administración Pública, al tiempo que aporta seguridad en las relaciones que mantengan con otras empresas. De hecho, su misión pasa por aportar una mayor transparencia en las cuentas.

Y eso no es todo, dado que además supone una excelente herramienta para controlar las cuentas de la compañía, la evolución del negocio y cuáles son los principales riesgos a los que se enfrenta.

Composición del PGC

Esta utilidad explica que la mayoría de las empresas cumplan las cinco partes de las que consta el plan, a pesar de que solo tres de ellas son de obligado cumplimiento.

A continuación exponemos cuál es la composición del PGC, aunque para garantizar su cumplimiento siempre será conveniente contar con la ayuda de profesionales especializados en la materia.

Partes obligatorias

- Marco conceptual. Incluye el conjunto de fundamentos, principios y conceptos básicos para “garantizar el rigor y coherencia del posterior proceso de elaboración de las normas de registro y valoración”.

- Normas de registro y valoración. Se incluyen un total de 23 normas redactadas para explicar el modo en que hay que valorar y registrar cada suceso.

- Cuentas anuales. En este caso, se especifican los documentos que se deben presentar para informar sobre “el balance, la cuenta de pérdidas y ganancias, el estado de cambios en el patrimonio neto, el estado de flujos de efectivo y la memoria”.

Partes voluntarias

- Cuadro de cuentas. Aplica a los estados financieros de la empresa: balance, cuenta de resultados y estado de cambios en el patrimonio neto, aportando de ese modo un excelente referente.

- Definiciones y relaciones contables. Describen los motivos más comunes tanto de cargo como de abono de las cuentas. 

PGC para pequeñas y medianas empresas

Dado que las pequeñas y medianas empresas (pymes) presentan diferencias con respecto a las de mayor tamaño, el Real Decreto 1515/2007 se centra en cómo crear un Plan General Contable para Pymes. 

Esta modificación tiene como objetivo adaptar el PGC a las necesidades y características de este tipo de organizaciones, simplificando y agilizando la gestión de la contabilidad. Eso sí, se trata de una medida opcional. Si una empresa pequeña no desea adoptarlo, no será necesario hacerlo. 

Por el contrario, aquellas pymes que deseen acogerse a este PGC deberán cumplir al menos dos de los siguientes requisitos durante dos ejercicios consecutivos:

  • El total de las partidas del activo no puede ser superior a 2.850.000 euros.
  • El importe neto de su cifra anual de negocios no debe superar los 5.700.000 euros.
  • El número medio de trabajadores empleados durante el ejercicio no puede ser superior a 50.

Asimismo, si se trata de una microempresa, esos mismos criterios varían:

  • El total de las partidas del activo no superará el millón de euros.
  • El importe neto de la cifra anual de negocios no superará los dos millones de euros.
  • El número medio de trabajadores empleados durante el ejercicio no será superior a diez. 


Sea de un modo u otro, la mejor opción para cumplir con las obligaciones que establece el Plan General Contable es confiar esa labor a especialistas, como es el caso del equipo de KPMG Impulsa. Descubre cómo podemos ayudarte en la gestión de tu negocio.











Formulario de Contacto

    • Te has suscrito correctamente

    Suscríbete y recibe nuestra newsletter